PROYECTOS DE ARQUITECTURA
Siempre que se levanta algún tipo de edificio, ya sea para uso residencial u otros usos, el arquitecto es, en la mayor parte de los casos, el técnico encargado de dar el primer paso: el desarrollo del proyecto. En muchos casos el arquitecto se especializa en diferentes tipos de construcciones: centros comerciales, hoteles, hospitales, oficinas o viviendas, entre otros.
En muchas ocasiones se diseña el edificio para que luego se pongan de venta al público durante o después de la construcción, pero una de las posibilidades es que el cliente quiera una casa a su medida. Para ello, necesita plantear sus necesidades y preferencias a un arquitecto para que éste proponga soluciones y recomendaciones acordes a las propuestas e ideas del cliente, en base a diferentes criterios, como pueden ser el confort, la eficiencia energética o necesidades de uso específicas.
ESPACIOS
Como clientes determinaremos el espacio que queremos para cada estancia, como una sala de estar amplia si le daremos mucho uso. También podemos prescindir de habitaciones innecesarias, decidir si queremos una cocina independiente o fusionada con el salón, una gran terraza, un cuarto de juegos para niños, un estudio o despacho para el trabajo, etc. El cliente será quien determine los materiales que se prefiere que se utilicen en los acabados si así lo desea. También se diseñará la distribución del jardín si el terreno lo permite, donde es posible añadir piscinas o elementos anexos. Otro factor importante es la orientación para aprovechar la iluminación necesaria para cada uso y de la exposición al sol como medio de mejora del confort y, si es posible, buscar las mejores vistas del exterior.
TODOS LOS DETALLES
Cuando se busca una arquitectura personalizada, no solo se trabaja en las necesidades, sino que mezcla la estética global de la casa con una buena funcionalidad y confort de cada habitación. Es importante tener claro lo que queremos porque una vez finalizada las obras será costoso hacer reformas, por lo que uno de las labores imprescindibles es redactar y consensuar una lista con las preferencias y necesidades, estableciendo cuales son prioritarias. Durante las reuniones con el responsable del proyecto es importante transmitirle de forma clara nuestra ideas para que el resultado final sea el deseado, ya que se tratará de una de las inversiones más importantes de nuestra vida.
Una vez redactado y aceptado el proyecto, el siguiente paso es comenzar con las obras de la vivienda, donde el arquitecto será el Director de la Obra, y por tanto, el representante de la propiedad ante los profesionales encargados de la ejecución. Así, a través de la Dirección de la obra, supervisaremos cada nuevo paso, estableciendo una estrecha relación con los profesionales de cada especialidad que participen. Cuando una obra parte de un buen proyecto personalizado, en el cual se definan con claridad y detalle las necesidades de la propiedad, el resultado siempre conseguirá satisfacer al cliente.
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